NAVIDAD EN ALSACIA: Visitamos 9 Mercadillos Navideños.
NAVIDAD EN ALSACIA: Visitamos 9 Mercadillos Navideños.
La región de Alsacia es la más oriental de Francia y también marca la frontera natural entre Francia y Alemania. Alsacia fue disputada durante siglos por las dos naciones y sólo pasó a ser francesa tras la Primera Guerra Mundial, en 1919 con el Tratado de Versalles. Su agitada historia y su proximidad a Alemania han conformado su identidad cultural, lingüística y gastronómica, dando lugar a un territorio único con tradiciones y culturas que pertenecen a ambas naciones: una región por descubrir que permanecerá indeleble en tu memoria. Alsacia encanta a los visitantes con sus pintorescos pueblos: las aldeas con sus coloridas casas de entramado de madera parecen sacadas de un libro de cuentos y están rodeadas de extensiones de viñedos que producen algunos de los mejores vinos del mundo. La región es una sucesión de valles verdes, salpicados de castillos medievales y fortalezas encaramadas a las montañas. A pesar de ser una de las regiones más pequeñas del país, Alsacia ofrece un paisaje pintoresco que la convierte en una de las regiones más bellas y características de Francia.
La capital, así como la ciudad más grande de Alsacia, es Estrasburgo. Alsacia es la sede de varias organizaciones y organismos internacionales, entre los que se encuentran el Parlamento Europeo o el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
La cigüeña blanca es el animal simbólico de la región, a tal punto que están presentes en muchos techos de iglesias y otros edificios públicos en Alsacia y, a veces, en los techos de casas particulares. El folclore, los cuentos, las leyendas, las creencias populares de Alsacia son una inspiración de la cultura germánica de Renania, teñido de latinidad y celtismo.
Nosotros vamos a situar nuestra base de operaciones en la margen derecha del Rio Rin (Alemania) llegaremos por el aeropuerto de Stuttgart, nuestro hotel lo hemos contratado en Offemburg, y haremos incursiones a las diferentes ciudades, tanto en la parte francesa como alemana que vamos a visitar.
1º Día:
Llegamos al aeropuerto de Stuttgart (Alemania) y nos despalzamos a la ciudad de Offemburg donde tenemos contratado el Hotel Ibis Styles Offenburg City. Tras acomodarnos nos disponemos a visitar el primer de los Mercadillos de Navidad.
Mercadillo de Offenburg
El mercado tiene lugar en la histórica Plaza del Mercado, rodeado de imponentes edificios como el ayuntamiento barroco y otras fachadas cuidadosamente restauradas. Este escenario le da al mercado navideño una atmósfera especialmente romántica y festiva que nos envuelve en el espíritu navideño. Los puestos del mercado se extienden por toda la plaza y las callejuelas adyacentes, y nos permite disfrutar de una gran variedad de puestos y atracciones, ademas cuenta con un variado programa musical en el escenario de la Sparkasse. En la plaza del Ayuntamiento encontramos el árbol navideño y podremos ver la bonita Iglesia de Nuestra Señora en Klosterstrasse iluminada y en el centro de la Plaza del Mercado se alza una pirámide navideña tradicional que, especialmente en las horas de la noche, crea un ambiente festivo con su iluminación y también encontramos una pequeña pista de patinaje sobre ruedas y el carrusel nostálgico, que llenan de alegría a los más pequeños.
Un aspecto especialmente destacado son las casitas de madera decoradas con esmero, que ofrecen una amplia gama de ideas de regalos hechos a mano, decoraciones y productos artesanales. Los abetos iluminados que decoran el mercado añaden un toque mágico y ofrecen una imagen encantadora, sobre todo al anochecer.
Este mercado se ha convertido en una tradición arraigada que transforma el encantador centro de la ciudad de Offenburg, en Baden, cerca de la Selva Negra y de la frontera con Francia, en un mar de luces festivas.
Delicias culinarias como almendras garrapiñadas, manzanas asadas, dulces tradicionales y especialidades como salchichas y flammkuchen complementan la oferta. Bebidas calientes como vino caliente, ponche para niños y cacao caliente crean un ambiente acogedor, incluso en los días fríos.
2º Dia:
Hoy nos disponemos a visitar dos ciudades en la Alsacia francesa como son Obernai y Estrasburgo la primera a unos 43 km desde nuestro hotel y la segunda a unos 32 km..
Vamos a comenzar por la más lejana y más pequeña de las dos.
Obernai: Es uno de los pueblos más bonitos y pintorescos de la Alsacia. Esta ubicado en el la ruta del vino, el pueblo está situado entre el macizo de los Vosgos y el Monte Saint Odile, patrona de la ciudad.Obernai fue propiedad de los duques de Alsacia a partir del siglo VII, siendo el lugar de nacimiento de santa Odilia, hija de los duques de Alsacia y venerada por la Iglesia Católica como patrona de Alsacia.
Durante el dominio de la familia Hohenstaufen, Obernai alcanzó el estatus de villa hacia 1240 y en 1354 se adhirió a la Decápolis Alsaciana, liga que agrupaba a diez ciudades imperiales de la región. La guerra de los Treinta Años causó graves daños tras la ocupación por las tropas suecas entre 1632-1634 y 1636-1650. Tras la anexión a la corona de Francia en 1679, la ciudad recuperó su desarrollo pero sin alcanzar la prosperidad de antaño.
Mercadillo de Obernai
El mercadillo de Navidad de Obernai es muy sencillo de visitar ya que está dividido en cuatro espacios diferentes que además te permiten visitar los monumentos más bellos del pueblo:
Mercado de Navidad de la Place Neher
La puerta de acceso por la muralla de Obernai da acceso a la pequeña Place Neher, ya “dentro” del casco antiguo.
El mercado de Place Neher es también pequeñito, con apenas una decena de chalets de madera decorados con ornamentación navideña. En su mayoría son puestos en los que puedes probar los sabores más típicos del adviento alsaciano, como las galletas de jengibre, el pan de especias y por supuesto el vino caliente, elaborado con vino, frutas y especias como la canela y el jengibre. Por cierto, cerca de la plaza encontraremos la sinagoga de la ciudad.
Mercado de Navidad de la Place du Marché
La Place de Marché de Obernai acoge otro de los pequeños mercados navideños de Obernai. Durante el año, aquí se celebra cada jueves el mercado de frutas tradicional de abastos, pero en fechas de celebración del adviento se convierte en un mercado permanente, seguramente el más fotografiado del pueblo. La plaza también suele acoger una pequeña feria con un carrusel para los más pequeños.
En plaza destaca la iluminación hasta casi medianoche de la Torre Beffroi o campanario de la Capilla de la Virgen, que cambia del azul al rojo, junto al Ayuntamiento de Obernai.
Mercado de Navidad de la Place Beffroi
Justo detrás de la Torre Beffroi se ubica una pequeña plaza con el mismo nombre y que acoge desde finales de noviembre el tercer mercado de Navidad de Obernai, también de pequeño formato pero con los tradicionales chalets de madera muy bien decorados.
En muchos chalets podrás comprar botellas de vino de algún productor local, lo que suma y hacen que este tipo de mercados se alejen de la Navidad más comercial que proponen las grandes marcas. En la plaza se ubica también la Oficina de Turismo de la ciudad y unos baños públicos que puedes usar.
Mercado de Navidad de la Place de L’Etoile
La Place de L’Etoile se encuentra tras el mercado navideño de Befrroi siguiendo la Rue du General Gouraud. Aquí las casas de entramadas destacan por su gran tamaño. De hecho, es una de las zonas donde podrás ver edificios tradicionales con más de tres plantas.
De nuevo, aquí no encontrarás un gran números de chalets, sino un mercado navideño pequeño pero muy animado gracias a un gran tiovivo abierto durante todo el año y que ocupa el lugar más bonito en la plaza.
Además de los mercados navideños, habitualmente en este tipo de espacios también se organizan eventos relacionados, como conciertos, talleres de decoración.
La plaza es un lugar bastante amplio, por lo que nos tomaremos tiempo para no sólo disfrutar de los bretzels, las galletas de mantequilla Bredele o lo ponches de fruta calientes, una alternativa al vino. Aquí las casas de entramados lucen con sus colores claros y decoración navideña.
Si no has visitado antes un mercado navideño quizás te sorprenda saber que el tradicional vino caliente se puede hacer con vino tinto o blanco. El tinto es el más común, pero en Alsacia encontrarás muchas opciones, puesto que es una destacada región vinícola.
Tras esta visita retornamos a nuestro bus y ponemos rumbo a la capital de la Alsacia: Estrasburgo que se encuentra a tan solo 29 km.
Mercadillo de Estrasburgo
El Mercado de Navidad de Estrasburgo es el mercado navideño más antiguo de Alsacia, lo que ha convertido Estrasburgo en la capital navideña por excelencia, con sus diferentes mercados y tradiciones y se celebra todos los años entre finales de noviembre y el 31 de diciembre desde 1570. Alrededor de 300 puestos de madera ubicados en 11 lugares diferentes forman uno de los mercados navideños más grandes de Europa y el más antiguo de Alsacia.
En la Edad Media, los puestos se ponían cerca de la catedral en el día de San Nicolás (6 de diciembre). En el siglo XVI, la ciudad pasó a ser protestante, al igual que su catedral a partir de 1529. En 1570, el pastor se opuso a que tuviese lugar un mercado consagrado a un santo no protestante, por lo que ese mismo año abrió el mercado del Niño Jesús, tres días antes de Navidad. Los artesanos vendían velas, objetos de madera, pequeños regalos...
En 1830, el mercado se cambió a la place Kléber y posteriormente, en 1870, a la place Broglie, donde se vendían objetos de decoración, cunas, productos artesanos, etc. En los años 90, los mercados se empezaron a multiplicar, así como la actividad que tenía lugar en el periodo navideño. Aún así, el mercado del Niño Jesús sigue estando ubicado en la place Broglie. El Chriskindelsmarik (Mercado del Niño Jesús) de Estrasburgo envuelve a toda la ciudad en un ambiente festivo mágico, con decoraciones en todas las fachadas de las casas con entramado de madera, iluminaciones de colores, olor a canela y vino caliente. Cada rincón de la ciudad se llena de magia con espectáculos de luz y sonido, conciertos para adultos y niños, música y canciones tradicionales, que resuenan por las calles resplandecientes de luces y colores. En la actualidad, en la entrada hay una puerta con guirnaldas que lleva la palabra “Christkindelsmärik” (mercado del Niño Jesús), para recalcar su origen antiguo.
Los diferentes espacios donde podemos encontrar los mercadillos son:
1. Mercado de la plaza Kléber
El más importante de Estrasburgo en Navidad. Se trata de un mercado solidario y el más recolectan las donaciones y los juguetes para ayudar a las personas más necesitadas.
Aquí también encontrareis uno de los árboles de Navidad más grandes de toda Europa, con 30 metros de altura y por supuesto, adornado con guirnaldas y luces. Una vez instalado el árbol y para poder adornarlo bien y que quede bonito, le trasplantan más de 180 ramas de otros árboles.
Todas las tardes, cada hora en punto de 17:00 a 23:00 horas, el gran árbol de Navidad cobra
vida durante un espectáculo de luz y sonido de unos 5 minutos de duración, de 21:00 a
23:00 el espectáculo es sin música.
2. Mercado de la plaza Broglie
Christkindelsmärik, es el mercado más antiguo de la ciudad, lleva más de 450 años animando la ciudad en estas fechas. Más de 60 casetas forman el mercado del niño Jesús, comenzó en la place Broglie en 1570 y desde entonces sigue siendo el corazón de la navidad de Estrasburgo.
Es uno de los mercados de Navidad más grandes que se pueden visitar en Estrasburgo, cuenta con muchos puestos de comida, genial para probar algunas especialidades de Alsacia.
3. Plaza de la Catedral
En los alrededores de la catedral de Notre Dame encontraréis más de 50 puestecillos, en esta zona hay más mercados navideños, muy pegados unos con otros. También hay muchos puestos de comida donde podéis probar el famoso vino caliente entre otras especialidades alsacianas.
4. Plaza del Castillo o Place du Château
Para muchos es uno de los mercados más bonitos de Estrasburgo en Navidad, a pesar de que no es muy grande, tan solo unos 30 puestecillos, pero tiene mucho encanto.
5. Terraza Rohan, marché des délices d'Alsace
Muy cerca del mercado de Navidad anterior, se encuentra el mercado de las Delicias de Alsacia, son unos 20 puestecillos y la mayoría de comida, ¡seguro que te atraerán por su estupendo aroma!
6. Rue Gutenberg
El mercado de esta plaza es muy peculiar, cada año invitan a un país para que muestre su gastronomía y productos locales. El mercado también es famoso por su árbol azul, iluminado con cientos de luces azules, ¡una maravilla al caer la noche! Seguro que no podrás parar de hacer fotos.
7. La Petit France. (Plaza de Benjamin Zix y Plaza Des Meuniers)
Este mercado se encuentra en una de las zonas de Estrasburgo más bonitas a nuestro
parecer, la Petite France. El mercado no es muy grande, pero no dudes en acercarte a visitarlo, ya que los productos son excelentes. Aquí solo venden productos locales, como foie-gras de Alsacia, caracoles del Kochersberg, mermeladas de Climont, hierbas aromáticas, quesos, champiñones. Una zona repleta de las típicas casitas que parecen sacadas de un cuento, tancaracterísticas de la región de Alsacia. Como no podía ser de otra manera, el mercadillo de Navidad que montan aquí es uno de
los más coquetos por su situación en mitad de esta antigua zona de la ciudad.
8. Otros mercadillos de Navidad por el centro de Estrasburgo
Plaza Du Corbeau.
Plaza Du Temple Neuf, un pequeño mercado de artesanos.
Plaza Saint-Thomas, 13 puestecillos situados al lado de la Iglesia de Santo Tomás.
Las iluminaciones durante el periodo de Adviento: al anochecer Estrasburgo se baña en un ambiente verdaderamente mágico y atmosférico. Millones de luces y adornos navideños se encienden para ofrecer a los habitantes y visitantes una escena encantada. Rue des Orfèvres es sin duda la calle más fotografiada de Estrasburgo en Navidad. nos sorprendierón los adornos de las fachadas y las tiendas. Por otro lado, en Rue du Vieux-Marché-aux-Poissons está la Puerta de las Luces: una entrada mágica al mundo de los cuentos de hadas navideños nos recibe con la enorme inscripción “Estrasburgo, capital de la Navidad” y unos hombrecillos festivamente iluminados. Los ángeles de Navidad, símbolo por excelencia de este evocador periodo, hacen mágica la calle Rue Mercière que desemboca frente a la Catedral de Estrasburgo. Incluso el barrio de la Petite France, íntimo y acogedor, muestra todo su encanto navideño, especialmente en Place Benjamin Zix, una pequeña y acogedora plaza. No olvidemos que Estrasburgo está construida sobre canales: durante las fiestas navideñas, las luces se reflejan en el agua creando mágicos efectos de cuento de hadas, como en, adornada con numerosas estrellas luminosas.
4º Día
Hoy vamos a dedicarlo por entero al que sin duda es el mejor mercadillo de navidad de toda la Alsacia ya sea la parte francesa o la alemana.
Colmar es una de las ciudades medievales más bellas de Francia y Alsacia, caracterizada por una maravillosa concentración de edificios históricos perfectamente conservados. Durante las fiestas navideñas, Colmar desata una magia de cuento de hadas sin igual: la ciudad encanta a los turistas con un derroche de decoraciones, decorados musicales, luces y colores que realzan aún más la belleza intemporal de sus monumentos medievales. Cada calle, palacio, plaza o canal está hábilmente decorado, engalanado e iluminado con el encanto y la atmósfera de la Navidad. Las casas de entramado de madera se transforman en un cuento de hadas sacado de un libro de Navidad, los villancicos y los colores animan cada rincón de la ciudad: te encontrarás catapultado a un mágico pueblo navideño . Desde finales de noviembre hasta finales de diciembre, podrás sumergirte en el ambiente navideño más increíble y alucinante: fabulosos juegos de luces y colores en las fachadas de los edificios, melodías y villancicos en las callejuelas, pistas de patinaje sobre hielo, olor a dulces de canela y vino caliente, la oficina de correos de Papá Noel, tiovivos para los más pequeños.
Los mercadillos navideños de Colmar son pura magia. De hecho, después de visitarlos, me parecen los mejores de la Alsacia. Colmar tiene nada más y nada menos que seis mercadillos de Navidad. Y no son mercadillos “de relleno”, sino que cada uno está especializado en una temática y están cuidados hasta el más mínimo detalle. De verdad, si vas a visitar Colmar en Navidad, te vas a emocionar al pasear por la localidad y al ver tanto ambiente alrededor de los puestos. Imagínate pasear por las plazas y por las calles de Colmar llenas de casetas, villancicos y puestos de comida. Dicen que la Navidad tal y como la conocemos nació en Alsacia y, está claro que, en Colmar la tradición sigue muy viva.
La gente local, espera el mes de Adviento con mucha ilusión porque es cuando se montan los mercadillos de Navidad en Colmar. La vida del pueblo cambia por completo mientras los mercadillos están desplegados y es que, por ejemplo, no se permite el acceso de vehículos al centro. Por otro lado, a los mercadillos les acompañan eventos como el canto de villancicos, la decoración del pueblo y el montaje de los pesebres.
Se instalan hasta 6 mercados diferentes, cada uno caracterizado por sus peculiaridades: artesanía, niños, gastronomía, productos locales, decoración navideña, artesanos y artistas. Puedes seguir una ruta por el casco antiguo, admirando los cascos antiguos festivamente iluminados, curioseando entre los relucientes adornos navideños a la venta en los chalets de madera, comprando regalos originales y probando las delicias gastronómicas de la cocina alsaciana, embriagado por el aroma de la canela y los panes especiados.
- 1.- Mercado de Navidad en la Plaza de los Dominicos.
Al pie de la elegante iglesia de los Dominicos en la Plaza de los Dominicos, es un mercadillo tradicional que destaca por vender figuras de madera y artesanía local encontrarás. En total, son 60 puestos donde encontrarás los mejores adornos para el árbol y para el belén. También, se monta un abeto y casetas de comida navideña como los bretzels, el vino caliente, los churros y los pastelitos de canela.
- 2.-Mercado de Navidad en la Place de l’Ancienne Douane.
Situada en el corazón del casco antiguo, Place de l'Ancienne Douane encontrarás otro de los mercadillos navideños de Colmar. En este mercado venden productos típicos de la Alsacia como el pan de jengibre, el vino, los dulces típicos y los embutidos de la tierra. Alberga casi medio centenar de casitas de madera, armoniosamente dispuestas en torno a la bonita fuente de Schwendi e instaladas a ambos lados de uno de los canales más bellos de la ciudad. Al caer la noche, podrás admirar un maravilloso espectáculo: el edificio Koïfhus se engalanará por completo con luces centelleantes, un increíble toque de magia en este rincón del casco antiguo. Para darle más encanto, está ambientado como si fuese un pueblo de la Alsacia con sus casitas de entramados de madera.
- 3.- El mercadillo de la Petite Venise.
El rincón más pintoresco de Colmar, la Pequeña Venecia, se convierte en Navidad en un auténtico paraíso para los niños. está pensado para los más pequeños y todo gira alrededor de los niños. Los más pequeños quedarán literalmente encantados en Place des 6 Montagnes Noires con las numerosas atracciones para ellos: dulces para degustar, un belén mecánico, corrales de animales, caballos en el gran tiovivo, sin olvidar el buzón gigante de Papá Noel y su oficina especial en la ciudad. La situación de este marcadillo navideño de Colmar es inmejorable. El barrio de la Petite Venise tiene un canal, casitas de colores y los restaurantes más románticos de la localidad. Además, al lado del mercado se monta un belén viviente.
- 4.- Mercado de Navidad cubierto de Koïfhus.
Es el mercado de Navidad de Colmar más diferente porque se monta en un recinto cubierto. Este majestuoso edificio medieval, el Koïfhus funcionó como almacén y aduana de Colmar. Era el sitio de referencia de los mercaderes para vender sus productos. De alguna manera, esta comercialización sigue viva y es que, en el Koifhus, se monta el mercadillo de Navidad de Colmar centrado en las manualidades y la artesanía y te ofrece la posibilidad de admirar y comprar las numerosas creaciones de los artesanos locales. En la primera planta, en una gran sala, verás trabajar a los artesanos alsacianos más interesantes. Artistas y artesanos exponen sus obras que van desde pinturas, esculturas, figuras talladas, joyas, sombreros, cerámicas.
- 5.-Mercado de la Place Jeanne d’Arc.
En la Plaza Juana de Arco Dominado por una serie de edificios que van desde las tradicionales casas con entramado de madera hasta el más puro estilo clásico francés,encontrarás otro de los mercadillos navideños de Colmar. este mercado ofrece a los visitantes una buena panorámica de la cultura alsaciana, venden productos típicos de la Alsacia como el pan de jengibre, el vino, los dulces típicos y los embutidos de la tierra.Para darle más encanto, está ambientado como si fuese un pueblo de la Alsacia con sus casitas de entramados de madera y recrea el ambiente íntimo de un pueblo alsaciano tradicional, con sus casas navideñas, su iglesia y su pequeño rebaño de cabras.
- 6.- Mercadillo de Saint Jeanne.
En la Place de la cathédrale durante la temporada festiva, se instalan 9 chalets para 9 chefs, maestros restauradores que inventarán para ti platos divinos, desde entrantes a postres, desde ostras a especialidades tradicionales alsacianas. Un mercado dedicado a la buena mesa, para degustar los manjares de Alsacia. la región ofrece un variado panorama gastronómico apreciado en toda Europa. Aquí preparan platos tan diversos que van desde las ostras hasta las tartes flambés. También, hacen dulces caseros que son un vicio. Puedes comer allí o coger la comida para llevar. Este mercadillo tiene un horario un poco diferente al resto de mercadillos navideños de la Alsacia.
A pesar de su pequeño tamaño, el pueblo de Eguisheim nos reserva muchas sorpresas a los visitantes: pintorescas callejuelas, rincones con encanto, bodegas donde degustar y comprar vinos locales, talleres de artesanía y un ambiente del viejo mundo para saborear. Estas callejuelas estrechas, están dominadas por las típicas casas de entramado de madera, adornadas con balcones decorados con flores y aún más encantadoras por los suaves colores pastel de las fachadas. No podemos olvidar echar un vistazo al interior de los grandes patios medievales: hoy albergan numerosas bodegas, que venden al por menor los excelentes vinos alsacianos. Si observas detenidamente las casas de Eguisheim, verás que muchas conservan las placas de antiguos oficios como panadero, carpintero o vinatero, mientras que otras eran sentidas súplicas de protección divina contra incendios y ataques militares.
Otro punto destacado del pueblo es la iglesia parroquial dedicada a San Pedro y San Pablo: fue construida en estilo románico, pero se remodeló con añadidos góticos en 1220. Admira la altísima torre de cuatro campanas y el magnífico portal adornado con una escultura de madera policromada que representa a la Virgen María.
El Mercado Navideño de Eguisheim.
Este mercado de navidad ha obtenido la certificación "Ciudades y pueblos de Navidad" recompensando la autenticidad y la riqueza de su patrimonio. En Navidad es la época en la que se transforma en un lugar verdaderamente mágico: todas las calles se llenan de aromas especiados y resuenan en el aire canciones festivas con un ambiente de cuento de hadas que se recrea mágicamente, el pueblo brilla con luces y adornos de colores, las calles están llenas de chalets de madera rebosantes de delicias tradicionales y bonitos adornos para comprar junto con artesanía local. Hay 2-3 zonas repartidas por los espacios más antiguos del pueblo con una decena de puestos de madera en cada uno, rebosantes de delicias tradicionales y bonitos adornos para comprar junto con artesanía local.
6º Día
Hoy acaba nuestro periplo por estas tierras y lo hacemos justo donde empezamos, tenemos tiempo de pasear por el centro de Stuttbart para ver algunos de sus monumentos y sobre todo ver otro de los fantasticos mercadillos navideños que sin duda es y ha sido el centro de este viaje.
Stuttgart
Es la capital del estado federado alemán de Baden-Wurtemberg. Con 633,484 habitantes, Stuttgart es la ciudad más grande de Baden-Wurtemberg y la sexta de Alemania. Además, es sede del parlamento de su Bundesland y su gobierno correspondiente, así como otras autoridades políticas y de la administración federal, contando también con el estatus de ciudad-distrito, unificada por un presidente. Así mismo, es sede del obispo evangélico de Wurtemberg y de un obispado católico (Bistum Rottenburg-Stuttgart).
La ciudad constituye el centro económico y cultural del estado federado, y está marcada por la tradición de la minería y la siderurgia. Posee dos universidades, escuelas técnicas y es sede de varios institutos de investigación, como el Centro Aeroespacial Alemán (DLR), el Fraunhofer-Gesellschaft o la Sociedad Max Planck.
Stuttgart es la puerta de entrada a la Selva Negra y al Jura de Suabia, y se asienta en un valle flanqueado por montañas llenas de viñedos conocido como el “Kessel”, la caldera. El puerto se sitúa al noreste de la ciudad, a orillas del río Neckar.
Tradicionalmente, Stuttgart es considerada como “la ciudad donde nació el automóvil”, y acoge dos museos dedicados a su historia: el Museo Mercedes-Benz y el Museo Porsche.
Mercado de Navidad en Stuttgart
Bajo el nombre de Stuttgarter Weihnachtsmarkt, el mercado navideño de Stuttgart se sitúa en el centro de la ciudad, principalmente en la Plaza del Mercado (Marktplatz) y Schillerplatz. Durante la época navideña las calles se llena de luces y decoraciones navideñas, tiene un gran valor histórico, ya que es uno de los más antiguos de Europa.Sus primeras referencias son de 1692, pero se sabe que sus orígenes se remontan mucho más atrás, al 1507. Fue ese año cuando el duque Ulrico de Württemberg cedió a la ciudad de Stuttgart el derecho a cobrar tarifas en las ferias anuales y el 16 de noviembre de ese mismo año se celebró un mercado de caballos el día de San Ottmar, una tradición que fue creciendo y que sirvió como base para el "Christkindleinmarkt" (mercado del niño Cristo), que se organizava desde el martes hasta el sábado antes de Navidad.
Durante las fechas que se celebra el mercadillo se suelen realizar conciertos en el patio del Castillo Antiguo de Stuttgart (Altes Schloss).
En la actualidad, el mercado es famoso por sus más de 280 puestos con techos de estilo posada, y por el ambiente festivo que se crea con el aroma de vino caliente, salchichas y almendras tostadas, en muchos puestos se ofrecen juguetes de madera, artesanías, joyas de todos los países, pero, especialmente de Alemania.
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